El envejecimiento es parte integrante de la vida. Nuestros padres o abuelos, a menudo en esta etapa avanzada de la vida, luchan contra trastornos mentales como los trastornos de ansiedad o la depresión. Esto no debe subestimarse. ¿Por qué un porcentaje cada vez mayor de personas mayores sufre trastornos mentales y cómo podemos ayudarles? Se lo sugerimos en el artículo.
¿En qué consiste la salud mental de los mayores?
La salud mental es un componente extremadamente importante del bienestar general de una persona. Se compone de muchos factores complejos que afectan colectivamente a nuestra capacidad para funcionar y afrontar la vida.
En primer lugar, una mente sana depende de nuestra capacidad para comprender y gestionar nuestras propias emociones. La capacidad de reconocer, expresar y gestionar los sentimientos es un elemento clave para mantener el equilibrio en la vida. La terapia emocional y las técnicas de autorregulación de las emociones son herramientas importantes para desarrollar esta capacidad.
En segundo lugar, las relaciones interpersonales desempeñan un papel importante en la salud mental. Crear y mantener relaciones sanas y de apoyo con otras personas puede marcar una diferencia significativa en nuestro bienestar y sentido de pertenencia. La terapia de pareja y familiar puede ayudar a resolver conflictos y mejorar la calidad de las relaciones.
En tercer lugar, cuidar bien el cuerpo tiene una enorme repercusión en el bienestar. La actividad física regular, una dieta sana y dormir lo suficiente pueden ayudar a equilibrar las hormonas y los neuroquímicos, lo que afecta a nuestro bienestar.
No hay que olvidar los factores genéticos y biológicos, que también son relevantes para la salud mental. La heredabilidad de ciertas susceptibilidades a determinados trastornos puede influir en el riesgo de desarrollarlos.
Por último, el apoyo de profesionales como psiquiatras, psicoterapeutas y otros especialistas puede ser crucial para mantener la salud mental. La terapia psicoeducativa, la farmacoterapia y las terapias cognitivo-conductuales son algunas de las herramientas que pueden ayudar a los pacientes a afrontar los retos de la vida cotidiana.
Es importante tener en cuenta que nuestra psique es un área compleja y multidimensional que incluye las emociones, las relaciones, el cuerpo y muchos otros factores. Cuidando estos aspectos, podemos contribuir a nuestro bienestar próximo.
¿Qué empeora la salud mental de las personas mayores?
La salud mental de las personas mayores puede deteriorarse debido a muchos factores, tanto los relacionados con el proceso de envejecimiento como otros factores externos. Entre los factores de riesgo que pueden deteriorar la salud mental figuran:
- Aislamiento social: las personas mayores suelen tener pocas oportunidades de participar en la vida social, lo que puede provocar sentimientos de soledad y aislamiento. La falta de interacción social regular puede afectar negativamente a la salud mental.
- Pérdida de seres queridos: el trauma asociado a la creciente pérdida de seres queridos y familiares puede dejar huella. Los sentimientos de soledad y desesperanza son causas muy comunes de deterioro mental.
- Problemas de salud: el aumento de los problemas de salud con la edad puede repercutir en una peor calidad de vida. El dolor, las enfermedades crónicas y la pérdida de independencia pueden provocar sentimientos de depresión e impotencia.
- Cambios en la función cerebral: el envejecimiento puede afectar a la memoria y la concentración. Las personas mayores pueden sufrir trastornos cognitivos propios de la vejez, como el Alzheimer o la enfermedad de Parkinson, que reducen la calidad de vida y les impiden funcionar con normalidad.
- Los cambios hormonales -especialmente los relacionados con la edad, como la disminución de las hormonas sexuales y tiroideas- pueden tener un impacto real en el estado de ánimo y el bienestar.
- Mala alimentación y falta de actividad física: la mala alimentación y la falta de actividad física son los problemas más comunes entre los mayores. Introducir una dosis regular de deporte y una dieta sana puede ayudar a mantener el equilibrio mental.
- Falta de acceso a la atención sanitaria: los mayores suelen necesitar atención sanitaria especializada, y la falta de acceso puede llevar a un tratamiento inadecuado de los trastornos mentales u otros problemas de salud.
- Trastornos del sueño.
- Mala situación económica: las personas mayores rara vez pueden disfrutar de una pensión enorme que les permita vivir con tranquilidad y seguridad. El estrés de los problemas económicos reduce la calidad de vida y puede provocar ansiedad.
¿Cómo apoyar la salud mental de las personas mayores?
Es importante rodear a los mayores de apoyo, teniendo en cuenta sus necesidades sanitarias y mentales. Las revisiones médicas periódicas, las actividades sociales, una dieta sana, la atención al sueño y el acceso a la atención sanitaria especializada pueden ayudar a los mayores a mantenerse bien hasta una edad avanzada. He aquí algunos pequeños gestos que pueden ayudar a los mayores a mantener su salud mental en buen estado:
- Contacto social regular: el envejecimiento suele ir asociado a un mayor aislamiento social. Por eso es importante mantener un contacto regular con las personas mayores, ya sea mediante visitas, llamadas telefónicas o el uso de nuevas tecnologías como la videoconferencia.
- Fomente la actividad social - ayude a las personas mayores a participar en actividades sociales como un club de mayores, actividades culturales o voluntariado. Esto puede ayudar a construir relaciones y mantener una vida social saludable.
- Fomente la actividad física: la actividad física regular es importante no sólo para la salud física y más allá. Ayude a las personas mayores a practicar ejercicios suaves, como caminar o hacer gimnasia.
- Una dieta sana: ayude a las personas mayores de su familia a mantener una dieta sana proporcionándoles comidas adecuadas y animándoles a beber suficiente agua.
- Cuidar el sueño - ayudar a las personas mayores a mantener un ritmo de sueño saludable y abordar el insomnio.
- Fomentar intereses y pasiones: anime a las personas mayores a perseguir sus intereses y pasiones, que pueden proporcionarles alegría y satisfacción.
- Mantenerlos a salvo: ayudar a garantizar un alojamiento seguro y el acceso a la atención sanitaria cuando sea necesario.
- Hable de sentimientos - anime a las personas mayores a expresar abiertamente sus sentimientos y pensamientos. Tómate tiempo para escuchar y ofrecer apoyo emocional.
- Anímale a buscar ayuda especializada: si observas que una persona mayor tiene dificultades para mantener un estado mental adecuado, anímale a consultar a un médico o especialista.
Conozca un péptido que favorece la salud mental
Epitalon es un péptido que ha llamado la atención en los últimos años por sus posibles beneficios para la salud. Este péptido corto está formado por cuatro aminoácidos y es una hormona natural de los mamíferos. Estudios clínicos y de laboratorio sugieren que la epitalona puede influir en el proceso de envejecimiento y tener efectos positivos en la función cerebral. Uno de los principales mecanismos de acción de la epitalona es la regulación de la actividad de la telomerasa, enzima responsable del mantenimiento de la longitud de los telómeros, estructuras situadas en los extremos de los cromosomas. Al favorecer la longevidad celular y prevenir el envejecimiento, también puede contribuir a para mejorar el rendimiento general y mantener el funcionamiento normal del cerebro e inhibir los procesos degenerativos. Aunque es necesario seguir investigando, esta sustancia es muy prometedora como posible potenciador de la salud mental en el contexto del envejecimiento.
Cómo tomar epitalon? Especialmente cuando se trata de ancianos. La sustancia para los ancianos será mejor tomar una forma intranasal. Epitalon spray Simplemente inyecte en la nariz, sin la molestia de una aguja o tragar una tableta de tamaño considerable. Ésta será la forma más cómoda de administración. La preparación de una solución de este tipo es extremadamente sencilla y debe describirse detalladamente en el prospecto que acompaña al producto.